lunes, 27 de febrero de 2017

Poesía.

La poesía también tiene sus baches. La poesía no puede ser siempre bondadosa. La poesía tiene ocio y tiene placer; tiene palabras frías, y otras hermosas.

Poesía es más que unos versos; es sentir que podemos comernos a besos. Poesía son tus pestañas en mi cuello; o tus manos en mi espalda intentando tocar el cielo.

La poesía no siempre habla de amores, a veces tiene que obligarnos a vencer temores. Poesía no es lo que escribo; poesía es hablar de rencores sin perder los estribos.

Poesía es lo que haces cuando me miras. Poesía es contar tus pestañas. Poesía es saber lo que escondes en las entrañas.

Poesía es complacer mi necesidad de ti. Poesía es mirar nuestras fotos, y poderte sentir. Poesía es lo que no supe hacer contigo; poesía es lo que me sale mal, y tú estás de testigo. 

Como yo.


domingo, 26 de febrero de 2017

Negrita.

Llegaste como llegan las malas noticias, pero fuiste todo lo contrario: de noche, sin previo aviso, y apenas con las ganas notorias de quedarte.

Al principio fuiste un habitante más de esta pequeña casa; luego, un momento especial de todos nuestros días; en la compañía inseparable de cualquier situación.

La dificultad es pensar en llegar de mañana, de noche, de madrugada, y no encontrarte ahí: saltando hasta mis muslos, para que te cargue, buscando una caricia muda sin dejarnos llegar siquiera.

Tu carácter tan enojón y a la vez tan sensible se volvió parte de nuestra forma de ser; te adueñaste de nuestras muestras de afecto, de nuestros apapachos, y también de nuestra desesperación por tus travesuras.

Tus juguetes regados por toda la casa, al principio, nuestros zapatos también; tus ladridos cuando quieres comer lo que nosotros, y el sonido raro que haces cuando tienes sueño... Todo eso has sido tú.

Te vas, pero no porque yo quiera; te vas porque necesito que estés bien, mejor. Te vas a un lugar donde alguien te quiera casi tanto como yo, donde puedas ser traviesa, donde también te dejarán dormir sobre su estómago si tienes miedo... Te vas, pero no por eso te dejaré de ver. Te lo prometo. 

domingo, 12 de febrero de 2017

Precipicio sentimental.

Lejos, como las nubes; y cerca, como tu recuerdo. Las memorias me atraviesan el alma, y me obligan a esperar; a mantener en mí la fe de continuar. 

No me interesa si regresas, o si sigo caminando en un andén lleno de asperezas. Quiero conservarte en lo vivido, en lo que a pocas personas he compartido. 

Te pienso, y se me revuelven las emociones; te pienso, y siento cómo me hacen eco las canciones. Terminas por envolverme en lo que tuvimos, pero a la vez me dejas fuera de éso que no fuimos. 

Te me olvidas a ratos, pero no logro sacarte de mis ilusiones, por más que trato. Precipicio sentimental en caída libre, eso eres cuando quiero; eso eres cuando existes.  

viernes, 3 de febrero de 2017

A ti que me lees:

A ti que me lees:

Gracias por venir a visitarnos, siempre es un gusto que nos acompañes; aunque, también contemplo la posibilidad de que hayas llegado a este lugar por accidente. No importa, ojalá te quedes. 

Te invito a que, si llegaste a éste, y ya has leído algún otro puñito de letras, me cuentes qué te ha parecido. Todo esto sale desde mi mente enredada, y mis vicios emocionales. 

Es un gusto contar con tu lectura. Buena noche.